Creo que necesito un poco de ayuda.
Solo para Varones…
Pero, sería bueno que sus parejas también lo leyeran.

Hablando de manera común y coloquial, cuando un hombre se excita sexualmente, su pene se llena con más sangre de la que comúnmente circula por él y adquiere una erección y se endurece. Cuando un hombre padece Disfunción Eréctil, su pene no se llena con suficiente sangre como para que tenga una erección total y se ponga firme. Otra manifestación de Disfunción Eréctil es en la cual sí se logra la erección, pero no se mantiene ni siquiera lo suficiente como para completar el acto sexual.

Realmente muchos hombres padecen este problemita. La gran mayoría no está conciente de ello porque desde hace mucho tiempo se ha pensado de la Disfunción Eréctil como Impotencia, o sea la incapacidad para tener relaciones sexuales y punto. Pero no es así del todo.

Tan solo en los Estados Unidos, que es donde se han hecho más estudios y encuestas al respecto, hay 30 millones de hombres padecen Disfunción Eréctil a un grado u otro. Y, el mismo estudio demuestra que aproximadamente el 50% de los hombres entre los 40 y los 70 años de edad tienen problemas de Disfunción Eréctil.


CONDICIONES DE SALUD ASOCIADAS CON LA DISFUNCIÓN ERECTIL

La Disfunción Eréctil puede ser provocada o estar relacionada a un problema vascular, trastornos neurológicos, ciertos fármacos, anomalías en el pene o problemas psicológicos que interfieren con la excitación sexual. En los hombres de edad avanzada los problemas físicos son los más comunes, mientras que en los hombres jóvenes los factores psicológicos son los predominantes. Por lo tanto debemos considerar que la impotencia es un problema que se vuelve más frecuente con la edad, a pesar de que no se considera como una etapa normal del proceso de envejecimiento.

Los trastornos en los vasos sanguíneos, como la aterosclerosis, pueden causar impotencia al no permitir un flujo adecuado de sangre en el pene para alcanzar una posición erecta. La Disfunción Eréctil también puede ser producida por un coágulo de sangre o bien por una cirugía vascular que impida el flujo de sangre arterial hacia el pene. En el 75% de los hombres impotentes que presentan un funcionamiento neurológico y hormonal normal, la sangre llega al pene de manera correcta, pero sale con demasiada rapidez.

Las afecciones de los nervios que entran y salen del pene también pueden provocar Disfunción Eréctil. Dichas afecciones pueden tener causas muy diversas, como lesiones, diabetes mellitas, esclerosis múltiple, ataques cerebrales agudos y fármacos. La diabetes causa neuropatía periférica, un patrón particular de daño nervioso y que es una causa muy frecuente de impotencia, en especial en las personas de edad. El alcoholismo causa una neuropatía periférica similar. Una enfermedad de la parte inferior de la médula espinal y la cirugía del recto o de la próstata también pueden causar daño a los nervios del pene.

Los medicamentos son responsables de aproximadamente el 25% de los casos de Disfunción Eréctil, en especial en los hombres de mayor edad, que tienden a consumir más fármacos. Los fármacos que más frecuentemente causan Disfunción Eréctil incluyen todos los antihipertensivos, los antipsicóticos, los antidepresivos, algunos sedantes, la cimetidina y el litio. El alcohol también puede causar la Disfunción Eréctil.

En ciertos casos la Disfunción Eréctil tiene su origen en trastornos hormonales. Las bajas concentraciones de testosterona, por ejemplo, pueden provocarla. Sin embargo, los valores bajos de hormona masculina, que tienden a aparecer con el envejecimiento, están más estrechamente relacionados con una disminución del impulso sexual.

Ciertos factores psicológicos, como la depresión y la ansiedad, pueden derivar en Disfunción Eréctil, al igual que la culpa sexual, el miedo a la intimidad y la ambivalencia respecto a la orientación sexual.

Pero, entre las más comunes se encuentra la diabetes, padecimientos cardiacos, y presión arterial alta.

DIABETES
La diabetes es una de las causas más comunes de la Disfunción Eréctil. Más de la mitad de los hombres con diabetes padecen en cierto grado

PADECIMIENTOS DEL CORAZÓN Y ALTOS NIVELES DE COLESTEROL
Las enfermedades cardiacas son algunas de las condiciones de salud mayormente relacionadas con la Disfunción Eréctil. Tomemos por un hecho que, la presencia de Disfunción Eréctil puede ser un signo de advertencia a una posible afección cardiaca.

Con un padecimiento del corazón, la sangre en el cuerpo no llega a los órganos tan fácilmente como debería. Entonces al considerar que para que se logre una erección es necesario que el pene se llene de sangre, esto es un aviso lógico de algo anda mal también con el corazón.

El tener altos niveles de colesterol incrementa el riesgo de padecer Disfunción Eréctil en un 90%.

PRESIÓN ARTERIAL ALTA
La Disfunción Eréctil y la presión arterial alta están comúnmente ligadas. Las encuestas demuestran que 2 de cada 3 hombres con presión arterial alta presentan Disfunción Eréctil a un grado u otro.

La presión arterial alta hace que el corazón trabaje de más y le crea un stress a los vasos sanguíneos. Los vasos sanguíneos se endurecen y se estrechan por lo que el flujo de la sangre hacia los órganos es bajo; incluyendo el pene. Por lo tanto, la Disfunción Eréctil también es un signo de alerta en posibles afecciones del sistema circulatorio.


OTROS FACTORES DE SALUD

Además de las condiciones de salud que ya mencionamos, existen otros problemas que se relacionan directamente con la Disfunción Eréctil.

DEPRESIÓN
Los hombres que están pasando por cuadros depresivos pueden padecer Disfunción Eréctil tanto por problemas psicológicos y emocionales como por problemas físicos, o ambos a la vez. Para la gran mayoría de hombres con depresión, la Disfunción Eréctil empeora su situación emocional. Esto es que, se crea un ciclo vicioso; baja autoestima, mala imagen de sí mismo, problemas con la pareja, etc.

CIRUGÍA DE PRÓSTATA
La Disfunción Eréctil es la reacción secundaria más común a las intervenciones de próstata. Si usted ha tenido ya una cirugía de próstata debe haber notado ya dificultad para lograr o mantener una erección. Esto no es extraño, y afortunadamente se puede tratar.

LESIÓN ESPINAL
Una lesión a la espina dorsal puede afectar casi cualquier sistema del cuerpo. En varones, la lesión sexual más común es la Disfunción Eréctil.

USO DE MEDICAMENTOS
Existen muchos medicamentos que provocan Disfunción Eréctil como reacción secundaria. Algunos de ellos son de efecto temporal o solo durante el consumo. Otros, tienen efectos más prolongados o permanentes.

ESTILOS DE VIDA
Las condiciones de salud y el consumo de medicamentos son las causas más comunes de Disfunción Eréctil, pero también están factores relacionados con el estilo de vida del individuo que afectan directamente la calidad de la actividad sexual. Sin embargo, estos factores de estilo de vida pueden ser controlados y modificado por el individuo para garantizarle una recuperación de la Disfunción Eréctil.

FUMAR
Si eres un fumador, déjalo. El fumar no solo puede provocar cáncer, enfisema, y algunas otras enfermedades frecuentemente mencionadas; afecta la circulación sanguínea y ya hemos mencionado como esto es un precursor de la Disfunción Eréctil. Ciertos estudios han demostrado que los fumadores de consumo prolongado tienen el 50% de posibilidades de padecer Disfunción Eréctil con un alto grado de afectación.

ALCOHOLISMO
El consumir más de dos copas al día es un factor fuerte que afecta directamente al sistema nervioso central y lo vuelve insensible, lo cual dificulta el obtener una erección. A la larga el daño es irreversible.
DROGADICCIÓN
El consumo de marihuana y cocaína han demostrado provocar Disfunción Eréctil.

STRESS
Tanto el stress como la ansiedad afecta la habilidad de obtener una erección. Es importante encontrar actividades y técnicas para reducir el stress; por ejemplo el ejercicio, meditación, yoga, etc.


DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO

Afortunadamente la ciencia médica y el mismo hombre han avanzado de la mano para la solución de cada vez más y más problemas médicos. Hoy en día la Disfunción Eréctil puede ser tratada con resultados altamente positivos y de bajo costo. La mentalidad y consciencia de los varones también es más abierta y prudente para permitir llegar a un diagnóstico certero y aceptar un tratamiento eficaz.

Como primer nota de sugerencia es importante saber que no se recomienda el consumo de ningún medicamento para la Disfunción Eréctil sin antes conseguir atención médica especializada. Esto es, solamente el médico puede prescribir estos medicamentos.

En la consulta con el médico, este debe indagar acerca de los síntomas para estar seguro de que problema es Disfunción Eréctil y no otro padecimiento como dificultad en la eyaculación. También, mediante el cuestionamiento se establece el grado de la disfunción. Las respuestas del paciente ayudarán a establecer si la disfunción responde a una raíz física o psicológica.

Es preciso repasar cualquier antecedente de cirugía vascular, pélvica, rectal o de próstata. Cualquier cambio en las características sexuales masculinas, como el tamaño de las mamas, los testículos y el pene; y los posibles cambios en el cabello, la voz, o la piel también deben tomarse en consideración. El médico puede indagar la posibilidad de que existan problemas psicológicos, como la depresión o la ansiedad. Cualquier situación estresante nueva, como un cambio de pareja o problema de relación o de trabajo, pueden ser un factor importante. El cuestionamiento debe tocar el consumo de medicamentos, con o si prescripción; y el consumo de alcohol y drogas.

Se pueden tomar muestras de sangre para medir los valores totales de testosterona y la cantidad de testosterona biológicamente activa (utilizable) ya que la deficiencia de esta hormona puede provocar la Disfunción Eréctil, pero también puede general crecimiento de las mamas, pérdida de vello púbico y testículos blandos y más pequeños. La medición de la presión arterial en las piernas puede revelar un problema de las arterias de la pelvis y de la ingle que llevan sangre al pene. También es importante determinar si el número de nervios que llegan al pene es aparentemente normal.

Otros análisis de sangre pueden ayudar a identificar enfermedades comunes que pueden provocar Disfunción Eréctil. Por ejemplo, un recuento completo de células sanguíneas puede indicar la presencia de anemia y de infección, la determinación de azúcar en la sangre o de hemoglobina glicosilada puede ayudar a descubrir una diabetes y la determinación de la hormona estimulante del tiroides puede indicar una glándula tiroides demasiado activa o bien deficiente.

Los vasos sanguíneos del pene pueden ser evaluados mediante un ultrasonido. Otras pruebas consisten en la inyección de fármacos en el pene para dilatar las arterias.

En si, la Disfunción Eréctil, se puede tratar sin necesidad de cirugía. La clase de tratamiento depende de la causa y el estilo de vida del individuo. Y atenderse adecuada y oportunamente le puede ayudar a mantener una vida placentera y sana ya que la Disfunción Eréctil es un indicador de padecimientos muy serios.